Porque la mente de la persona promedio en el siglo 21 está saturada con inserciones mentales e información caótica ajena a sus propios procesos racionales, vagamente hablando eso impide que las personas puedan alcanzar un nivel reflexivo lo suficiente alto como para que puedan iniciar sus propios procesos creativos. La sociedad actual básicamente te ofrece dos alternativas: te dedicas a continuar con trabajo que estaba haciendo otra persona (y que completarlo tampoco signifique nada muy relevante) o te dedicas a perder el tiempo en actividades que te conducen a un estado hediodista de existencia sin que te des cuenta de lo que te está sucediendo. Si mantienes a la personas con un alto nivel de estrés causado por preocupaciones mayormente banales entonces no les queda espacio ni tiempo para pensar en otras cosas que no sea lo que te mantiene ocupado. Es como una suerte de ataque DDoS biológico al cerebro humano, de sol a sol.