Primero, debes ir al psicólogo. No estás bien de la mente, tu salud mental está deteriorada y, como solución, se te ocurrió hablar con entidades que ni siquiera entiendes. Ni siquiera entiendes qué es un grimorio ni qué es un ritual, no sabes ni has leído ningún libro de ocultismo, ni te has enterado de la vida y obra de algunos personajes importantes. No sabes de etimología ni símbolos, no tienes conocimientos de canalización de energías. Esto solo te va a conducir a intentar ritos mal logrados que te van a perjudicar más la psique. Te vas a volver loco, vas a pensar que te hablan los demonios, cuando realmente eres tú mismo rayando la papa...
Para entrar a hacer algo así, mínimo debes estar cuerdo y sano. No deprimido, ni usar esto "porque andas depre y odio mi vida". Suena ilógico, pero debes respetarte, amarte y entender qué chucha te está pasando antes de hacer algo tan delicado como una invocación.
Los demonios o entidades no son malévolos en su totalidad, pero van a aprovecharse de que estás desesperado y te van a utilizar a su favor, lo que usualmente tiene dos caminos: volverte esquizofrénico o perder la vida inútilmente...
De que se puede, se puede. Pero no es para todos, menos aún si andas con problemas depresivos.
Además, una vez que haces pactos o ritos, no hay vuelta atrás, y cuando se te pase la rabieta y quieras tener una vida normal, no vas a poder.
-Anda al psicólogo y explícale todo esto, incluidas estas publicaciones que estás haciendo.
-Haz ejercicios: sentadillas, brazos, flexiones.
-Intenta levantarte temprano y tomar un vaso de agua.
-Deja por completo de tomar alcohol y drogas.
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