La unión cívico-militar que gestó el gran Hugo Chávez es popular y democrática. Democratizar las Fuerzas Armadas tomar nota de este concepto. En los Estados liberales se suele hacer una errada separación absurda entre civiles y militares, la oligarquía tienda a despojar a los militares de su condición de pueblo, de su dignidad humana para así usarlos para asesinar a su pueblo. El civil y el militar no dejan de ser lo mismo ambos aman, temen, sueñan y sienten lo mismo, los civiles son una milicia y los militares son civiles. Chávez entendió esto y le devolvió la dignidad humana a los militares, el militar tiene derecho a hacer política, no como el concepto liberal que concibe al militar como un agente externo "neutro", que en la realidad significa que el militar está bajo control de la oligarquía, en sus cuarteles esperando órdenes de asesinar al pueblo. Nuestra unión cívico-militar sacó a los militares de sus cuarteles, los puso a disposición del pueblo, a construir carreteras, escuelas, hospitales, patrullar las calles y reconciliarse con el pueblo, los volvió una entidad popular presente en cada barrio. Nuestra Fuerza Armada Nacional Bolivariana lleva ese nombre porque nuestros militares son ideológicamente bolivarianos y chavistas, al igual que nuestro pueblo.