Gracias a la izquierda vives en democracia, tienes derecho a votar, tienes derechos sociales y eres libre.
Si no fuera por la izquierda aún seguirías vestido con un saco de papas obedeciendo un rey y atontado por el cristianismo.
Realmente nosotros somos los arquitectos de la civilización moderna, la revolución francesa fue el momento histórico que separó la civilización de la barbarie, el comienzo de la democracia popular y de los movimientos emancipatorios, sin reyes, ni dioses, solo pueblos.