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Técnicamente hablando, ninguna. Dependiendo de cuanto le quede de mandato asume el vicepresidente y si algo le pasa a este, sigue el ministro del Interior y así, suma y sigue (puede que aquí me este mandando un julayazo, pero al menos de lo que recuerdo si existe en Chile una linea de suceción presidencial). No queda vacante el cargo. Si falta poco tiempo asume el que sigue en la lista y llama a elecciones presindeciales.
Ahora bien, desde un punto de vista político o social, sobre todo de cara al exterior, que un presidente sea cesado, depuesto, asesinado o etc; es decir, forzado por vía no democrática a abandonar su puesto, es tremenda mala señal. Te habla que dicho país es un mierdal caótico sin dirección. Nadie quiere hacer tratos comerciales con países de mierda que en cualquier momento pueden convertirse en la nueva Cuba/Venezuela o el Cuarto Reich.