Entonces hazte cargo de tus comentarios, tira la piedra tranquilo acá te dejamos pero no escondas la mano porque no hay falta más grande a caballerosidad o la mismísima hombría que pseudohombre con convicciones endebles, cambiantes o de las cuales se arrepiente, no tienes que andar borrando nada si de verdad tuvieras los cojones para mantener tus ideas en el tiempo.