Estos weones no saben hacer otra cosa que no sea pedir y dar pena. Los haitianos por 煤ltimo vend铆an super8, pero los venecos hasta el comercio ambulante lo convierten en mendicidad con la t铆pica de ofrecer dulces a cambio de una "cooperaci贸n", siempre acompa帽ados de algun ni帽o que muy probablemente no es de ellos.