Yo odio a todas las rameras que trabajan en recursos humanos y a todos los homosexuales que trabajan de piscologos.
Estuvr años buscando trabsjo y las suripantas no me dejaban trabajsr porque no soy suficientementr normalito. Y la vez que más lejos llegué en buen trabajo el psicologo no me dejó seguir porque no ví lo que el quería que vea en sus manchitas de mierda.