Siempre que vendo una de mis gloriosas figuras siento que estoy vendiendo parte de mi esencia, me duele y por eso no perdono a quienes buscan que les baje el precio con ellos dejo caer mi ira como si fuera mi espada en la garganta de un hereje.
El chileno codos café y piel amarilla tiene que aprender a pagar el precio que sale en la publicación y entender que al leer dice NO se permuta y NO se conversa, es NO.