Nunca le he encontrado la gracia a jugar videojuegos de juegos de mesa, lo encuentro medio ahueonao. La gracia de los juegos de cartas o de mesa es precisamente esa, jugar con los cartones en la mano, en una mesa, con personas. Alguna vez jugué Magic en línea y me aburrió, también he jugado otras hueás como Catan y similares en línea y también pierden toda su gracia.