Yo creo que no es "sólo" la editorial. Dio la casualidad de que, en la semanal, terminaron hueás eternas, otras se fueron a hiatus infinitos, otras las cambiaron a publicaciones mensuales para terminarlas (Gintama), y otras que prometían ser largas duraron muy poco, todo en un lapso de como diez años o menos. Como Neverland, Kimetsu o Haikyuu.
Luego, que Kishimoto fallara en todos los flancos con Samurai Seven y el guión Boruto (aunque fuese mensual, que igual está asociado a la Jump) sólo demostró que no es muy confiable para esperar otro buen proyecto suyo...
Faltan mangas de deportes que reemplacen lo que fue Haikyuu, y más atrás Eyeshield.
De hecho, creo que falta un ecchi cochinote que tome el lugar de To Love Ru, porque Yuuna-san fue muy tibio y Ayakashi Triangle se fue a otra subpublicación.
A lo mejor el ritmo semanal efectivamente es más pesado que la chucha.
No sé si las elecciones de nuevas series sean muy malas, pero hay decisiones que sí me gustaron, como la publicación oficial de los episodios en mangaplus, tirándose al mercado internacional con cuática, incluyendo el hispano.