Kaiser no considera a los carimierdas como inmigrantes genuinos, los ve como invasores que vamos a expulsar. Cuando Kaiser dice esto, está pensando en los inmigrantes palestinos cristianos, los italianos, los alemanes, los vecinos peruanos y argentinos, los franceses, que han llegado a invertir y trabajar en Chile cuando se ha necesitado. Una vez que expulsemos a los venecos y otros negros caribeños, esta frase de Kaiser no es para nada polémica.