Yo estuve igual entre 2019 y 2023. A veces hasta 3000 mg (1 frasco y medio de 20 ml), lo tenía que tomar con alguna benzo para no convulsionar. Curiosamente, me gustaba más que la morfina y codeína que me dejaban somnoliento y pajero, a diferencia del tram que me dejaba con energía, pero sin la ansiedad de estimulantes. Es un fármaco muy raro: inhibe recaptación de serotonina y algo de norepinefrina, agonista opioide luego de ser metabolizado, antagonista NMDA, etc. Por eso la abstinencia es tan difícil. Te entiendo cuando dices que daban ganas de matarte, a mí me pasaba lo mismo, es una depresión a otro nivel.
Varias veces lo tomaba con pastillas de tapentadol, benzos y pregabalina y no sé cómo estoy vivo.
Desde 2024 lo tomo pero solo esporádicamente, para ocasiones especiales, una o dos ves al mes. En el verano de este año ni siquiera lo tomé, mi tolerancia era demasiada y un gasto de plata innecesaria. No hice taper o reducción ya que nunca me funcionó, así que fue cold turkey. Los primeros días son difíciles pero algo me ayudó la pregabalina (creo que en muchas farmacias la venden sin receta) y clonazepam. Si estás comprometido a dejarlo, también podrías tomar un antidepresivo SSRI/SNRI, pero solo si estás seguro de no tomarlo, ya que si lo mezclas con tramadol hay riesgos de convulsiones y además muchos antidepresivos son inhibidores del metabolismo del tramadol.