>>34876
he sido testigo de cómo weonas psiquiatricas (a las que la familia les ha encubierto los intentos de suicidio para que no se las lleven al peral y la esconden para que no de le pueda demandar por pension de alimentos) han televigilado a sus piernos con airtags, o han intervenido las cámaras wifi de la casa del loco sólo por celopatía enfermiza, se hacen las sumisas pero al más minimo capricho no satisfecho arman un sketch de infidelidad descubierta que, sea verdad o mentira, justifica su violencia contra el pierno y el histerismo con el que lo tratan o los intentos de suicidio con el que intentan chantajearlo, tienen tantos problemas de autoestima que creen q cualquier weá que haga sombra les puede quitar a su hombre, no tienen ninguna proyección de vida que no sea estar con un weón, dedicarse matar tiempo en redes sociales con memes de gatos tirándose peos, o dedicadas a su "arte"/ dibujo, cosplay, ser metalica, gótica, tocar música o cualquier otra irrelevancia que acaba invariantemente en cahuines de weonas igual de siquiatricas que ella peleando entre ellas mismas por lo que pensaron que la otra hizo o no hizo, o por que la otra es más puta que ella y le roba la atención masculina. y por supuesto ninguna de esas actividades acaba generandoles ingresos, tampoco han estudiado para valerse solas o siquiera aportar en donde sea que vivan de allegadas. lo mas suave que te pueden hacer es convertir toda tu plata en peos mientras se tira las weas todo el día y aún así tratarte como las weas porque miraste a la weona q te tenía que dar el vuelto del pan, no sin antes saltar como enferma de la cabeza sobre tu tula (pobre de tì que no funcione sino es que te estás satisfaciendo afuera) para subirte al carrusel del emociones diarias del que ella ya es parte y del cual la única forma de controlar es con los medicamentos de loquero que tienes que obligarla a tomarse junto con los anticonceptivos. oh por dios no querrás pelear con ella para que intencionalmente bote las pastillas en lugar de tomárselas , como represalia hacia tí.
no caigan ahí. verlo siquiera en tercera persona ya es para curarse de espanto con las pelocolores acólitas del ojo de loca.